miércoles, 14 de diciembre de 2016

A contra corriente.



Quién dijo que las personas no podemos crear la magia, quien dijo que las miradas no hablan y que las almas no bailan…
Quién creyó que no era posible pasear sin pasos y volar sin alas. Quien tenía que ver las cosas para creerlas.
…quien piensa que todas estas cosas no son posibles carece de fe…
Puedo explicarte amor, que se pueden hacer todas estas cosas, tan solo hay que creer en ellas.
Puedo tenerte aquí sin que llegues a venir, puedo sentir tu abrazo y me das la seguridad que estás tan acostumbrada a dar.
Puedo dormir contigo amor  estando sola en mi cama, puedo soñarte, puedo darte los buenos días y las buenas noches.
Puedo llevarte en mi coche e incluso puedo agarrar tú mano y ver cómo  me sonríes, me das calma cuando me susurras y me pones nerviosa al mismo tiempo sin que lo sepas.
Te llevo en mi bolsillo para tenerte siempre a mano, porque sé que me haces bien…
Te tengo aquí mientras escribo estas letras y me agarras por los hombros para masajearlos. Me das tus muestras de cariño y te veo en la mirada que estas contenta.
Pienso, que si estás aquí es porque quieres estar, es lo que más deseamos las dos y nos hace enfadar que no sea así.
Que no es real, ya lo sé. Que no está pasando, en parte sí.  Que solo es producto de la imaginación, las cosas que sentimos no lo son.  Que está a años luz de suceder, todo es proponérselo….pero consigues erizarme la piel aun estando lejos.
No hay nada que más deseemos que saber que sentiríamos mirándonos a los ojos, que nos dirán nuestras miradas, que clase de reacción nos darían.
Imagino unos ojitos llenos de luz, alegres y sensibles a la vez, de los que se cierran cuando se ruborizan, de esos ojos que se clavan en la mirada de quien desea mirarlos, que se rasgan al sonreír,  unos ojos que me dan la calma que necesito para mantenerme en equilibrio y a la vez me llenan de ansiedad por no dejar de mirarlos.
Imagino unas manos perfectas, finas, suaves, delicadas y bonitas, reconozco que me han cautivado tus manos “beya”. Tus manos…las que imagino recorriendo mi cara, acariciando mis cejas, agarrando las mías con fuerza. Recorriendo mi cuerpo con ellas mientras me pides susurrando, por favor que siga tranquila…
Imagino unos brazos, que como dices, dan seguridad. Unos brazos que abarquen todo mi cuerpo que me aprieten hasta tal punto que pueda seguir el ritmo de tus latidos y querer pedirte que por favor no me sueltes.
Imagino una sonrisa, que hace que muerda mis labios al pensarla y bajar la cabeza al mismo tiempo. Imagino una sonrisa que sin saber cómo es ya me encanta.
Imagino unos labios capaces de decir mil y una cosas que me provocan, cosas bonitas y cosas que me hacen reír. Imagino tus labios tan cerca que me da hasta miedo, imagino que se acercan sin pausa hacia mí y se funden con los míos…
Imagino, imagino, imagino y vuelvo a imaginar…..y aun imaginando me das  miedo, siento ansias, siento pánico…me asustas. Quiero dejar de  imaginar para tenerte aquí, quiero sentirte y que seas real, poder mirarte, tocarte, abrazarte y descubrir las cosas que ya sé que me encantan de ti…
Puede que nos estemos equivocando, que bien sea todo esto demasiada  imaginación, demasiado deseo y demasiadas ganas. Puede que tengas razón y estemos alimentando “nada”, puede que estemos confundidas  y lo que creemos sentir y por lo que sentimos miedo no sea nada, solo eso, nuestra imaginación, nuestras ganas de soñar simplemente.  Pero sé que mientras no te mire directamente a los ojos no podré  descubrirlo…
No sé mañana, pero sé de hoy y de ayer, por eso te digo que mi mayor deseo es dedicarte un poco de tiempo amor,  que estemos tú y yo en nuestros  “ratos” a solas, en nuestras risas, en las historias, en ese tiempo que quiero repetir siempre una vez más…me haces perderme, pierdo hasta la noción del tiempo y esa sensación es tan buena.

Yo puedo ver la magia en las personas, puedo crearla y la hago evolucionar, y tú eres una de esas personas mágicas que con una simple palabra me hace reír. Y;  “yo creo que dos personas que se hacen reír, tienen derecho a todo.”

No hay comentarios:

Publicar un comentario