Volver a verte

Volver a verte… esa sensación de volver a tenerte, volver a sentirte, volver a mirarte.

Ese deseo de hacer realidad un nuevo encuentro, una nueva historia, el principio de un comienzo que se nos brinda imparable, insaciable, inconsciente, desorbitado…

Siempre quiero verte, siempre quiero verte, siempre quiero verte. 

Es algo que no me canso de repetir mil veces, y mil veces más te lo diría al oído mientras te estremeces.

Día tras día sujeto la ansiedad de estar a tu lado, tengo que atarla fuerte y corto para que no se vaya de mi o sin mi.

Todas las mañanas te abrazo en este lugar donde quiero hacerte mía, donde cada noche me abriga tu deseo y tu calor. Todas las mañanas me despierto y sueño con tus besos, con tus ojos, con tus manos y tu piel.

Todas las noches te espero impaciente para que me susurres –ven aquí- y responderte –voy- para así poder abrazarnos.

Tú y tus brazos me llenan la vida de vida, me la han llenado y me la van a seguir llenando. Eso lo sé.

Volver a verte…volver a vernos, impacientes por no poder esperar hasta la fecha señalada, por no querer esperar; sé que fui yo quien tiro la primera piedra, esa con la que comenzamos a construir nuestro camino, el que andamos de la mano mientras nos paramos a besarnos por las esquinas de las calles de cualquier ciudad, de la tuya o de la mía, de tus plazas o de mis playas, de tus lluvias o de mi sol…

No importa el lugar, lo importante es que voy a verte de nuevo y a sentir como me llamas sin voz y me gritas en silencio.

Dos gotas de agua

Somos solo dos gotas de agua en esta tarde de tormentas, solo dos gotas de esta lluvia que nos moja el alma y nos purifica a la vez, solo dos gotas que agarradas de la mano podemos llegar al mar y sentirnos océanos inmensos…

Si miras a mis ojos puedes ver un mar de posibilidades, de adversidades y de experiencias que quiero vivir a tu lado. Momentos mágicos llenos de manos agarradas, de miradas intensas, de besos ardientes y caricias incontrolables.

Si miras dentro de mí, puedes ver, todo lo que estoy deseando darte, todo lo que quiero hacer nuestro y todas y cada una de las cosas que quiero que sintamos juntas.

No hay fuerza capaz de frenar la erupción de un volcán, no hay manera de parar la caída de la lluvia sobre los cristales, ni tampoco la forma de evitar que el sol en su momento de furia nos pueda quemar la piel si nos exponemos a él.

No existe la manera de parar una fuerza imparable, ni de mover un objeto inamovible… como el agua que recorre el caudal de un río deseando fundirse con el mar, como el fuego que no es nada sin el oxígeno de la vida para permanecer ardiendo, como el aire que se cuela por la rendija de tu ventana y silba para que puedas oírlo, como las piedras que contienen agua en su interior, como la tierra que a veces roja y a veces rubia pero siempre es tierra, como la arena que se funde con las olas del mar cuando sube la marea…como tu boca que se funde con la mía como si de arena de playa se tratase, como tus manos que encajan a la perfección con mis manos que te esperan ansiosas. 

Como tú y como yo echándonos de menos y nuestros latidos llamándose entre ellos para sentirse a salvo…

No existe motivo por el que parar estos latidos que se llaman sin descanso, que se entienden y se necesitan. No podrás encontrar la manera de parar esta noria que gira sin control ante tus ojos, que no eres capaz de controlar ciertas cosas que van solas, que todo pasa por algo amor y nosotras no somos una casualidad. 

Que tu boca me pide todo lo que estoy dispuesta a darte y tu cuerpo habla por ti sin control alguno sobre tu mente, que las ganas son imparables y el deseo es abrasador.

No pienses mi niña, no quieras correr ni tampoco frenar. Solo siente, vive y disfruta.

Podemos tener todo un mar dentro de un vaso y podemos ponerle pasos a unos zapatos rotos pero nunca podremos ponerle freno a las cosas que queremos sentir y nos llenan los corazones que tan vacíos estaban…

Podemos llenar una habitación entera de bonitas caricias, de besos eternos, de miradas insaciables. Podemos parar el tiempo. Podemos brillar más que cualquier estrella, podemos sentir por dentro todo lo que mostramos por fuera, podemos ser perfectas dentro de la imperfección que nos envuelve.

Quiero montar en esta noria contigo, quiero el vértigo y el miedo a las alturas, quiero sentir que va rápido y lento a la vez. Quiero agarrarme fuerte a ti cuando sienta que te alejas, quiero que no dejes de construir tus muros protectores para llegar y de un solo soplido derribarlo como si de un muro de papel se tratase. Quiero que sigas mis pasos sintiendo que me persigues, quiero caminar contigo de la mano y perdernos por las calles de los lugares que soñamos juntas, que sabemos que algún día visitaremos y quiero mirarte a los ojos y sentir que estas dentro de mí.

Quiero una historia contigo que no sea capaz de escribir, experiencias que me sorprendan y un zarandeo a los sentidos que nos haga creer que todo es posible si se puede sentir…deja mi niña que sea tu sueño, tu despertar y tus noches en vela. Deja que sea tus buenos días y tus buenas tardes, déjame cariño que viaje hasta el lugar donde estás para secarte las lágrimas, quiero ser tu calma y tu descontrol. Quiero que me llames a gritos y me susurres a la vez. Déjame ser el motivo del brillo en tus ojos y deja que te de todas las cosas grandes que ya te doy.

Déjanos crecer, y créete que si has llegado a mi vida ha sido para llenarla de todo aquello que tienes guardado para mí.

Gracias

Aún recuerdo cuando todos me decían –todo lo que venga ahora será bueno- a eso yo respondía  -ya, claro a peor no puedo ir…-

Ahora miro hacia atrás y es cierto que he vivido muy malos momentos, han sido realmente tristes y desconsolados. Fueron como yo creía los peores momentos de mi vida y por los cuales creí morirme.

Esto me ha enseñado a no vivir en el pasado, ni tampoco en el futuro. He decidido que tengo que mirar por mi presente.

Y en el ahora tengo algo maravilloso…

Tengo nuevos sentimientos que han despertado en mi como despierta el dragón que custodia una princesa en una torre y viene su príncipe a rescatarla.

También tengo nuevas ganas, ganas de salir, de entrar, de estar pero sobre todo ganas de vivir.

Tengo ganas de vivir y experimentar cosas que no he sentido antes. Lo mejor es poder aprender y poder enseñarte.

Me alegra mucho cuando me describes todas las cosas que estas aprendiendo conmigo, todo lo que me dices que antes no eras capaz de hacer. Cosas que para mí son tan naturales, como ir paseando de la mano por la calle, pararse en las esquinas y entre los coches a llenarnos de besos, mirarnos a los ojos y que movamos el mundo.

Has aprendido amor, que todo pasa por algo y tú has llegado a mí para hacerme sentir, para hacerme feliz.

Que yo no te he buscado, que nosotras nos hemos encontrado.

Por eso digo que tengo nuevas cosas que aprender y enseñar. Tenemos un mundo lleno de sensaciones nuevas y preciosas por sentir.

Tengo alegrías nuevas, tengo momentos perfectos, noches llenas de besos, tengo sabanas desorbitadas, tengo un desorden ordenado, tengo un misterio en los cajones, tengo kilómetros por recorrer, tengo ganas de volver…

Tengo nuevos planes…hacía mucho tiempo que no planeaba nada, y con la lluvia por testigo formamos nuestras cosas juntas. Nuestras comidas, nuestras cenas, nuestras noches y nuestros días, nuestros viajes de ida y también los de vuelta…todo lo que queramos.

Por eso hoy miro atrás, miro y la única palabra que sale de mi boca hacia mi pasado es, gracias, gracias por marcarme el camino para llegar hasta aquí, gracias por quitar de mi vida las cosas que no me hacían sentir completas y gracias sobre todo por poner en mis días la luz que me da vida, que me hace sentir.

Hoy tengo muchas cosas nuevas y todas de ellas son buenas y positivas. Tengo un alma que se entrega a la mia y unas manos que no quieren soltarme, tengo días por venir y vivirlos al completo y tengo cambios que me han dejado huella.

Todo lo que tengo, todo lo que perdí, todo lo que me queda por ganar…todo ha sido por algo. Dejé mi ropa de tristeza en un cajón olvidada y ahora visto y calzo de la felicidad que me das, que me doy yo y de la que puedo llegar a darte.

Gracias de nuevo a la vida por traerte hasta mí y por hacerte luchar a contra corriente.

A contra corriente.

Quién dijo que las personas no podemos crear la magia, quien dijo que las miradas no hablan y que las almas no bailan…

Quién creyó que no era posible pasear sin pasos y volar sin alas. Quien tenía que ver las cosas para creerlas.

…quien piensa que todas estas cosas no son posibles carece de fe…

Puedo explicarte amor, que se pueden hacer todas estas cosas, tan solo hay que creer en ellas.

Puedo tenerte aquí sin que llegues a venir, puedo sentir tu abrazo y me das la seguridad que estás tan acostumbrada a dar.

Puedo dormir contigo amor  estando sola en mi cama, puedo soñarte, puedo darte los buenos días y las buenas noches.

Puedo llevarte en mi coche e incluso puedo agarrar tú mano y ver cómo  me sonríes, me das calma cuando me susurras y me pones nerviosa al mismo tiempo sin que lo sepas.

Te llevo en mi bolsillo para tenerte siempre a mano, porque sé que me haces bien…

Te tengo aquí mientras escribo estas letras y me agarras por los hombros para masajearlos. Me das tus muestras de cariño y te veo en la mirada que estas contenta.

Pienso, que si estás aquí es porque quieres estar, es lo que más deseamos las dos y nos hace enfadar que no sea así.

Que no es real, ya lo sé. Que no está pasando, en parte sí.  Que solo es producto de la imaginación, las cosas que sentimos no lo son.  Que está a años luz de suceder, todo es proponérselo….pero consigues erizarme la piel aun estando lejos.

No hay nada que más deseemos que saber que sentiríamos mirándonos a los ojos, que nos dirán nuestras miradas, que clase de reacción nos darían.

Imagino unos ojitos llenos de luz, alegres y sensibles a la vez, de los que se cierran cuando se ruborizan, de esos ojos que se clavan en la mirada de quien desea mirarlos, que se rasgan al sonreír,  unos ojos que me dan la calma que necesito para mantenerme en equilibrio y a la vez me llenan de ansiedad por no dejar de mirarlos.

Imagino unas manos perfectas, finas, suaves, delicadas y bonitas, reconozco que me han cautivado tus manos “beya”. Tus manos…las que imagino recorriendo mi cara, acariciando mis cejas, agarrando las mías con fuerza. Recorriendo mi cuerpo con ellas mientras me pides susurrando, por favor que siga tranquila…

Imagino unos brazos, que como dices, dan seguridad. Unos brazos que abarquen todo mi cuerpo que me aprieten hasta tal punto que pueda seguir el ritmo de tus latidos y querer pedirte que por favor no me sueltes.

Imagino una sonrisa, que hace que muerda mis labios al pensarla y bajar la cabeza al mismo tiempo. Imagino una sonrisa que sin saber cómo es ya me encanta.

Imagino unos labios capaces de decir mil y una cosas que me provocan, cosas bonitas y cosas que me hacen reír. Imagino tus labios tan cerca que me da hasta miedo, imagino que se acercan sin pausa hacia mí y se funden con los míos…

Imagino, imagino, imagino y vuelvo a imaginar…..y aun imaginando me das  miedo, siento ansias, siento pánico…me asustas. Quiero dejar de  imaginar para tenerte aquí, quiero sentirte y que seas real, poder mirarte, tocarte, abrazarte y descubrir las cosas que ya sé que me encantan de ti…

Puede que nos estemos equivocando, que bien sea todo esto demasiada  imaginación, demasiado deseo y demasiadas ganas. Puede que tengas razón y estemos alimentando “nada”, puede que estemos confundidas  y lo que creemos sentir y por lo que sentimos miedo no sea nada, solo eso, nuestra imaginación, nuestras ganas de soñar simplemente.  Pero sé que mientras no te mire directamente a los ojos no podré  descubrirlo…

No sé mañana, pero sé de hoy y de ayer, por eso te digo que mi mayor deseo es dedicarte un poco de tiempo amor,  que estemos tú y yo en nuestros  “ratos” a solas, en nuestras risas, en las historias, en ese tiempo que quiero repetir siempre una vez más…me haces perderme, pierdo hasta la noción del tiempo y esa sensación es tan buena.

Yo puedo ver la magia en las personas, puedo crearla y la hago evolucionar, y tú eres una de esas personas mágicas que con una simple palabra me hace reír. Y;  “yo creo que dos personas que se hacen reír, tienen derecho a todo.”

Deseo

Esta noche me has preguntado si lo que siento por ti es deseo, lujuria o desenfreno y al tener que contestarte me he dado cuenta de lo que realmente siento por ti.

Siento unas ganas locas de volver a sentir tu abrazo, siento que ya no quiero salir de tu vida ni que salgas de la mía, siento, cariño, que eres alguien especial, alguien que ha llegado a mi vida para llenármela de cosas buenas y positivas.

A la vez siento que me vuelves un poco loca la cabeza, como bien dices, eres la chica que ha venido a romperme los esquemas.

Claro que siento deseo hacia ti. No podría negarte eso mi vida, eres todo un torbellino de sensaciones a mi lado, pero deseo mucho más que sentir ese tornado abrasador de pasiones.

Deseo hacerte feliz cada día, porque creo con total certeza que puedo conseguirlo.

Deseo tener noticias tuyas cada mañana, ya que así alimentas mis días de los rayos de luz más cegadores.

Deseo escucharte y sentir que estas aquí, porque sabes que puedo sentirte aquí desde la distancia.

Deseo pasear contigo por la calle agarradas de la mano y  a la vez reírnos de las personas que nos miren con recelo, porque aunque tú no seas de hacer esas cosas, juntas las haremos.

Claro que es deseo mi niña, pero es deseo de mucho más, porque somos muy grandes y volamos muy alto.

Deseo a cada momento tenerte cerca, quisiera abrir la puerta cuando llamen al timbre y verte la cara para iluminar así la mía de felicidad.

Deseo que no me digas por teléfono que quieres verme, deseo que nos veamos.

Quiero que no sea todo deseo, quiero que sea realidad, que nos miremos a los ojos con la fuerza de ayer. 

Que nuestras manos se unan como si de una sola mano se tratase. 

Que tu boca me susurre sin apenas sonido y yo sea capaz de escuchar lo fuerte que eres capaz de hablarme.

Que el recuerdo de tu olor deje de ser un recuerdo, deseo que el calor de tu aliento sea aún más cálido junto al mío.

Deseo pasar una tarde entre películas y palomitas de maíz.

Deseo pedir comida a domicilio porque el frío de la calle nos quita las ganas de enfriarnos las manos.

Deseo pasarme el día pensando en que te voy a ver mañana, tocarte, besarte y sentirte mañana…

Deseo despeinarte de la risa, beberme tu mirada, olerte con el alma, comerte la sonrisa, hacerte cosquillas hasta reventar, que tuvieras que pedirme entre risas desbocadas que pare, que por favor pare que ya no puedes más.

Deseo dormir a tu lado. Cada día lo imagino y sé que sería maravilloso, sé que al despertarme la sonrisa será el reflejo de lo feliz que eres capaz de hacerme.

Deseo que me acaricies la cara mientras me miras.

Deseo que me mires a los ojos y me digas que me quieres sin hablar.

Deseo que me soples al oído que te sientes completamente llena, llena de mí, de ti, de nosotras.

Deseo que tus miedos sean mis miedos, abarcarlos en mi cuerpo y devolvértelos siendo mucho menos miedos.

Deseo que tu vida sea parte de la mía con más intensidad que todo esto.

Deseo que tus amigos sean mis amigos.

Deseo que tus cenas sean mis cenas, tazón de cereales, el menú perfecto para antes de irse a la cama…

Deseo que tus risas sean mis risas, y al mismo tiempo que mis risas las provoques tú.

Deseo que mi pulso se calme y se acelere a tu lado, porque sabes darme a cada momento lo que necesito y no quiero que dejes de hacerlo.

Deseo enfadarme y que tú de un plumazo disuelvas el cabreo más desorbitado y lo transformes en migajas.

Deseo rozar tu piel y verte sonreír.

Deseo mi niña, que volemos juntas, alto muy alto y ver el mundo desde arriba.

Deseo con todas mis fuerzas dejar de soñar lejos de ti y comenzar a soñar a tu lado, contigo, nosotras…

Sentir que estas cerca y no tener que desear que lo estuvieras.

Deseo tanto y con tantas ganas que no quisiera desear todo esto, quisiera tenerlo y creer que es verdad, creernos que es real, tan real como nosotras mi vida, tan real como las cosas que nos mueven por dentro y tan real como que estamos separadas y deseamos estar juntas.

Deseo darte todo, todo lo que me permitas darte. 

Quiero darte esa parte de mí que pueda hacerte feliz. 

Porque deseo mi niña que seas feliz a mi lado…

Escribo para que leas...

Buenas….ayer cumplí 31 años, bonita edad verdad.  Y no encuentro manera mejor para celebrarlo que comenzando esta nueva aventura que es escribir.

Primero quiero agradecer a las personas que me quieren por quererme, a las que no lo hacen por no hacerlo y a las que puedan llegar a mi vida por venir.

También a todas las personas de mi vida ya sea por pasar, parar o quedarse, les agradezco su granito de arena o su gran montaña que hace que yo construya mis castillos en la playa.

Quiero agradecer en primer lugar a mi madre, por darme la vida…dicen que hasta para nacer fui testaruda, me opuse a todas las barreras que me pusieron y dije; aquí estoy yo mamá.

Me gustaría también agradecer a todas esas personas que han pasado por mi vida…por pasar de largo…eso tenía que ser así.

También a las personas que siguen a mi lado, que caminan de mi mano y sé que jamás me soltaran.

Y por último lugar, pero no menos importante,  a esas nuevas  personas, que no estaban pero parecen que llevan toda una vida  a mi lado. Gracias por sumarte a mi camino y dejarme ir a tu lado, gracias por permitirme volar alto.

Aunque esto parezca una carta de agradecimientos, es mucho más que eso.

Es el principio de un nuevo yo. De un nuevo tú. ¿Y porque no? De un nuevo nosotros.

Vive, lucha, sueña, cree, vuela, corre, quiere, busca, canta, llora, ríe…sé libre y piensa libre…